martes, 15 de diciembre de 2015

CANTO A LA JUVENTUD

Es la juventud un tesoro extraordinario
que vivo y siento en mi presente.
¡Soy joven! Adoración de un mundo fascinante
que inunda mis entrañas, ansiosas de vida,
deseosas de amor, de ilusiones, de esa atracción
que siempre he soñado culminar. Tengo la fruta
exuberante de la juventud, siento el color
de este buen tiempo pero necesito otros sabores
que me gustaría disfrutarlos bajo este signo armonioso
que ahora rodea y condecora mi vida.
Quiero palpitar una juventud siempre adorable
y ver cumplidos mis deseos, gozar
de las dichas que merezco ahora, ahora
que son joven, ahora que el éxtasis
de mi ser puede ser más grandioso
y regocijante que nunca. Juventud, tesoro
que permanece en mi corazón y que quisiera
no perder, tesoro que anhelo conservar
y que quisiera absorber más intensamente.
Verdad de la vida, horizonte
pleno de pasiones a las que quisiera
llegar porque ser joven es una pregunta
al amor cuando aún no se ha gozado.
No quiero que te vayas de mi mundo,
quiero seguir siendo joven, quiero tenerte
con la plenitud resuelta de mis objetivos.
Ahora te tengo, juventud, etapa radiante
de proyectos y sensaciones que ya debería
haber saboreado porque la vida presenta
esos deseos y necesidades que se sueñan,
que se quieren y que debemos culminar.
Paraíso inmenso de hermosura
al que nos puede conducir
la existencia joven, este tesoro
que nunca se quiere perder
porque la juventud es una razón pura
que intensamente debemos disfrutar.


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