ES UNA MAÑANA DE INVIERNO

Es una mañana de invierno
y los sueños de una adolescente
se manifiestan vivamente con la lectura
de tiernas poesías amorosas. Hace frío,
ha nevado durante toda la noche,
pero no existe la melancolía
para este alma pura que abrigada
al calor de la lumbre disfruta
con el testimonio sentimental
de la literatura de siempre. Resulta
hermoso sumergirse en la expresión
de tanto encanto romántico, de tantas
grandiosas creaciones. Y es el amor,
como realidad universal, una fuente
de inspiración de los poetas que necesitan
plasmar en la lírica todo el mundo
sensitivo que les rodea. La joven lectora
descubre nuevos autores, toda clase
de composiciones con las que se siente
feliz, le fascina asociar toda la belleza
creada con su sentimiento presente
y sus sueños futuros. La poesía deja
huella en sus emociones, palpita
la estética universal del arte
literario manifestada en el género
que más impresión y estímulo
transmite a su corazón enamorado.