Noches de pasión y sensación de terciopelo.
Amanecer brillante de cielos azulados.
Bienestar de ternura al decirte que te quiero
con tus besos y ardores y todos tus encantos.
La vida nos es grata y fervorosa y alada.
Nuestro delirio es de fiel alegría y ensueño.
El gozo vespertino y las noches estrelladas
es un limpio horizonte de amor halagüeño.
Todo el hálito tuyo y esos gratos perfumes,
todo el palpitar de tu corazón verdadero.
Este mundo tan celeste me eleva a la cumbre
de la pureza sublime de todos los sueños.
Encantado de pasear tus versos tras tan tanto tiempo de ausencia en los grupos literarios sevillanos.
ResponderEliminarSaludos y ánimo para seguir.
Agustín Pérez
Lo normal y más correcto es realizar un comentario del poema o escrito publicado y no dedicarse a decir que a uno ya no se le apetece frecuentar los grupos literarios de Sevilla. Aquella etapa de tertulias quedó afortunadamente terminada en mi vida para siempre.
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