Alegre, viva y hermosa
es la mujer sevillana,
con esa sangre moruna,
con esa mente cerrada.
Una mente que no piensa
en dar una voz temprana.
Un alma que espera y quiere
su futuro en el mañana
sin corresponder a tiempo
a un alma tan desolada.
Mujer que quiere el amor
con el mañana en las mantas.
Mujer que verá el fracaso
por ver su alma rechazada
cuando ese futuro llegue
a la persona olvidada.
Cerrada y materialista
esa mujer sevillana
que no quiere despertar
su mente tan ahogada.
Piensa, quiere, pero espera
la felicidad del alba...
Atenta, dulce, hermosa
y mentalidad esclava.
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